Quiero tanto a Julio...que no había modo de llamar a un sitio donde armara mi rincón de juego con letritas...Letras propias, letras de otros, famosos, anónimos...Letras.
Quiero tanto a Julio... que Rayuelando me dispongo a escribir...deudora de su mundo de conejitos, cartas, cronopios y porque no de famas también.
Rayuelando..."porque andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos" como dijo Julio...Cortázar
.

sábado, 3 de marzo de 2012

Estrenándose....

Se escuchó gritar.
Perdido en un lugar familiarmente ajeno...se escuchó gritar.
El murmullo del bar no consiguió despegarlo de los ecos de su grito.No sabía porque pero una calma inmensa lo invadía.
Estaba allí.
Después de días, noches, años de no estar...estaba allí.
Las miradas que le ganaban el rostro mascullando burla no lo tocaban siquiera.
Volvía a estar...y no había más que alegría por eso, no había lugar para el pudor o la timidez.
De hecho, no había sitio para ningún pensamiento que tapara la sensación gigantesca de sentirse.
Había vuelto...y sin embargo, no era el mismo.
Pero no extrañaba lo que ya no era.
En ese instante no concebía otra cosa que sentirse , así, como  recién estrenado, como echandose a andar por primera vez.
A su alrededor ya todos habían olvidado su grito, inmersos en lo que les era importante.No su grito que sólo lo era para él.Su grito....que rompió la dureza de un silencio eterno como su necedad.
El mozo se acercaba ya a preguntar si estaba bien, si necesitaba algo.
Se escuchó contestarle que se había quedado dormido...un mal sueño.
Mintió.....sólo para que el mozo no enloqueciera.
Mintió...sabía que se trataba del despertar.
   
                                                                               Gabriela

No hay comentarios:

Publicar un comentario